Derrick Muturi, CEO, Herdy

Sólo contrata basándote en valores. Si la persona que contratas cumple los valores básicos, todo lo demás se puede enseñar.

Se puede enseñar habilidad. Yo diría que puedes enseñar a la gente a hacer diferentes cosas. Pero contrata también a alguien que tenga un conjunto diverso de habilidades.

Porque recuerdo, por ejemplo, que cuando contratamos una gerente de ventas. Ella sabía vender, pero no era una persona con don de personas. El proceso de venta no era algo que le gustaba. Así que ella odiaba esa parte del trabajo. Pero cuando pasó a relaciones con los clientes, que había hecho cuatro años antes, le encantó, y allí floreció de verdad.

Creo que hay que contratar a personas dinámicas, que puedan desempeñar distintos roles. Porque cuando se trata de una startup, es necesario que todas las personas hagan todo lo que puedan.

Debería haber dinamismo, desde el principio. Alguien que encajara al menos en tres roles diferentes. Pero también, en el fondo, tienen los valores básicos que ustedes defienden como organización.

Mina Shadid, Cofundador & CEO, Numida

Al principio, la forma en que construimos el equipo se centraba en dos cosas. Habilidades y experiencias, y luego alineación de valores.

Queríamos asegurarnos de que, cuando contratáramos a las primeras personas, sus valores estuvieran realmente alineados.

Creo que uno de los errores que cometen las startups es que piensan que necesitan contratar competencias pronto y alguien con experiencia al principio. Puede que contrates a alguien que tenga mucha, mucha experiencia, pero que esté tan lejos en la escala de valores que, al final, no sea eficaz o no te guste trabajar con esta persona. Tienen un impacto negativo en el conjunto de la empresa, aunque, sobre el papel, sean la persona candidata adecuada.

Así que tuvimos que hacerlo, y lo hicimos muy, muy conscientemente. Nos aseguramos de equilibrar ambas cosas, sobre todo al principio. Creo que cuando éramos como menos de 10 personas, había muy poca habilidad. Y, ya sabes, mucho más centrado en la pasión y la alineación de valores.

Reflexiones finales

Evita contratar únicamente en función de la experiencia: enfócate en valores fundamentales y propósito compartido. Las habilidades pueden desarrollarse, pero la alineación es clave para el éxito a largo plazo. Da el siguiente paso: evalúa tus prácticas de contratación y empieza a priorizar la realineación de valores en cada decisión.